Diez beneficios del ver

Jim Clatfelter 

1. Ver es algo honesto y completo. Vemos y somos conscientes de que vemos el campo completo. Vemos tanto al “veedor” como a la escena. Si se prefiere, se pueden utilizar otros términos. Hay docenas de ellos. La visión hacia dentro y la visión hacia fuera. La visión de lo cercano y lo lejano. Y estos dos no están separados. Surgen al unísono.

2. La visión de dos vías hacia dentro demuestra en la vida real el significado detrás de las ideas de infinito, lo eterno y el gran vacío. Es atemporal (el eterno ahora), sin espacio, y vacío de contenido en la dirección hacia dentro. ¿Por qué estas ideas resultan reconfortantes? Quizás en parte porque nos dan una identidad expandida.

3. Ver hace que retires tu atención de las ideas de auto-mejoramiento. ¿Cómo podrías mejorar la eternidad y el infinito? Encontrar esto, en tu centro, puede aliviar cualquier insatisfacción que sientas acerca de tu experiencia de vida. Tienes que descubrir por ti mismo si es que esto es verdad para ti. No me corresponde a mí determinarlo. Esto podría hacer más fácil enfrentar las dificultades cuando surjan, porque ya no puedes salirte de tu centro tan fácilmente como solías hacerlo. Todo funciona mejor cuando estás tranquilo, y mejor aún cuando estás centrado en la calma suprema.

4. Ver te centra en lo que es, más que en lo que debería ser. Si estás centrado en lo que debería ser, no puedes evitar sentirte insatisfecho. Cuando encuentras la plenitud del momento presente, reconoces su importancia.

5. Ver te impide creer en tonterías. Ver está basado en experimentos. Es experiencial, no dogmático. El dogma nos divide, ver nos une. Tal vez el jurado esté aún deliberando sobre esto. El dogma no desaparece de un plumazo. Las ideas extravagantes son numerosas entre las así llamadas enseñanzas ‘espirituales’. Aquellos que toman el ver con seriedad pueden darse cuenta que no necesitan de ningún dogma, doctrina ni certeza en ningún frente. Pueden vivir sin saberlo todo. ¿Por qué? Porque experimentan todo acerca de nada, una nada que pueden encontrar en el corazón de su propio ser. Haciendo eco de Laozi: ¡Esto es suficiente!

6. La naturaleza del veedor (conciencia) es la apertura y la aceptación de todo lo que aparece. Si ves esto como tu identidad esencial, seguramente hará alguna diferencia en cuanto a cómo contemplas y actúas en el mundo. Douglas nunca especificó cuáles serían estas diferencias. Dijo que serían diferentes para cada uno de nosotros.

7. Ver muestra que en el centro todos somos idénticos. Quien realmente ve debe estar inclinado a ideas igualitarias. Somos más que iguales. Somos idénticos en los momentos importantes. Quizás esta comprensión pueda extenderse en nuestras actitudes hacia los demás. Cuando vemos a los demás como idénticos a nosotros mismos, ¿cómo podríamos considerarlos como menos dignos que nosotros? En el fondo, ellos son nosotros mismos.

8. La forma de hacerlo es serlo, de acuerdo con Laozi. La idea de la espontaneidad, como la describe Douglas y el término Daoista ‘ziran’ es que la acción sigue al ser. Consigue ser (ver) correctamente primero, y la ‘acción correcta’ seguirá. No me gusta mucho esta expresión. Acción correcta me suena como a sermón. Suena como algo externo. Los veedores no son seguidores. Los veedores no siguen ninguna dirección (orden), ni conceptos externos. Ellos honran la dirección interna.  ’Ve y ve que pasa’, así lo plantea Douglas.

9. Ver también nos muestra que la visión hacia fuera también es parte de lo que somos. Douglas solía decir que los veedores ‘pueden lavarse las manos de nada.’ Si se ve profundamente, podemos confiar en nuestras respuestas. Podemos confiar en que el verdadero ver es el verdadero ser y hacer. El ver jamás abandona a nadie. Tu vecino es tú mismo.

10. Todo esto se da sin la necesidad de sermonear ni establecer códigos morales para ti ni para nadie más. La acción se ‘aplica espontáneamente,’ para utilizar la frase de Douglas. Se da ‘ziran,’ para utilizar la expresión de Laozi, por sí mismo, espontáneamente. No hay reglas que se apliquen uniformemente a todos. Todos somos individuales. Tenemos diferentes experiencias y diferentes talentos.

Me imagino que alguien más podría encontrar otros diez beneficios de ver. Cada quien lo explica a su manera. Sé que era lo que Douglas esperaba. Él siempre dio la bienvenida a las diferentes expresiones del ver sin cabeza. Cuando ves tu propia naturaleza vacía, ¿confías en que este vacío, en que este no saber hará surgir las acciones apropiadas? ¿O hay algo en ti que desea controlar lo que sucede? A mí me parece obvio que todos lo hacemos como lo estamos haciendo. No hay nada que hacer al respecto. ¿Confiamos en lo que aparece o tratamos de controlarlo? Ve y ve que pasa es una respuesta. Yo me quedo con esta.
(Traducido por Tarsila Murguía)